La recuperación del apellido Interceptor es toda una declaración de intenciones por parte de Royal Enfield, una denominación que se utilizó por vez primera en 1960 con un modelo de notable éxito en Estados Unidos, en especial en California. Eran los años en los que la bonanza económica permitía a los jóvenes disfrutar del sol y las playas a los mandos de sus naked de estilo roadster y cuyos recuerdos se replican de manera exacta en la nueva Interceptor 650.

Moderna y original

La Interceptor 650 no es una adaptación clásica de un modelo actual sino que es auténtica de nacimiento. Mantiene las líneas clásicas que se suponen de una montura inspirada en esos felices años 60', en donde destaca el depósito de gasolina con forma de lágrima y el doble asiento corrido acolchado de grandes dimensiones. A esto hay que añadir la doble salida de escape en posición elevada y el gran faro delantero de forma redondeada que juntos logran esa estética clásica sin necesidad de añadir accesorios de ningún tipo. Todo lo contrario, cuenta con un diseño totalmente minimalista en el toma gran protagonismo el motor, que al estar refrigerado por aire dispone de las aletas para ayudar a enfriar los cilindros.

Pero lo más importante de este propulsor no es la imagen, es lo que supone en sí mismo. Se trata del primer bicilíndrico de Royal Enfield en la época moderna, un motor que hereda la sencillez de antaño pero con tecnología actual. Cubica 648 cc y cuenta con un calado a 270º, lo que se aprecia en el sonido y en la respuesta tan peculiar semejante a la que se obtiene con un V-Twin. Rinde 47 CV, con lo que es apto para la usuarios del carnet A2 y otorga una cifra de par de 52 Nm a 5.250 rpm, aunque el 80% del mismo está disponible a sólo 2.500 rpm. Por otro lado, monta una caja de cambios de seis velocidades, lo que es toda una novedad en la historia de Royal Enfield, y embrague con sistema antirrebote.

El mismo esquema clásico se mantiene en la parte ciclo. El chasis, diseñado por Harris Performance, toma una estructura en doble cuna en acero, al cual se suman unas suspensiones compuestas por una horquilla convencional con barras de 41 mm y un doble amortiguador trasero con regulación en precarga y con depósitos de gas separados. En los frenos aparecen componentes ByBre, con un imponente disco delantero flotante de 320 mm de diámetro como elemento más destacado, en donde hay que resaltar el ABS de Bosch como principal ayuda a la conducción.

Asiento para tres

La Interceptor 650 es sobre todo una moto muy cómoda, con un amplio asiento en el que cabrían tres personas adultas y que tiene un mullido bastante generoso pero que permite llegar al suelo con lo dos pies fácilmente. Su manillar es algo ancho -y con barra central- pero sin obligar a forzar la postura, manteniendo la espalda siempre de forma recta. El tacto de los mandos es suave, especialmente el del embrague que siendo por cable ofrece un tacto similar al que se consiguie con uno hidráulico aunque no cuenta con regulación, como tampoco la tiene la maneta del freno. En líneas generales se aprecia una mejoría en los acabados respecto del resto de modelos de la marca india, especialmente en la pintura del depósito, con distintas terminaciones disponibles.

royal enfield interceptor 650 prueba instrumentacionLa instrumentación está compuesta por dos relojes analógicos, el izquierdo incluye el velocímetro y una pequeña pantalla LCD con el nivel de gasolina, el cuentakilómetros y dos parciales; mientras que el derecho incorpora el tacómetro. Los conmutadores son bastante básicos y entre ellos no encontramos un botón para encender las cuatro luces intermitentes para emergencias. Como comentaba, terminaciones más conseguidas pero espartanas y sin lujos, pues tampoco se ha optado por luces de LED, que por otra parte restarían encanto en una montura tan clásica en la que se han cuidado hasta los colores en los que está disponible. La unidad que me ha tocado probar cuenta con un naranja muy elegante pero también se encuentra en otros dos tonos monocolor, plata y negro; dos bicolores con un incremento en el precio de 200 €; y en cromado, cuyo coste se eleva en 500 € adicionales.

47 CV que cunden mucho

La Interceptor 650 es agrabable a la vista, y también al oído, y es que el sonido que emana de sus dos escapes es realmente cautivador, ronco pero nada molesto independientemente el ritmo que imprimamos a la marcha. Desde los primeros metros ya se intuye ante qué tipo de moto estamos, una montura deliciosa, con un cambio y un embrague de suave accionamiento y con muchos muchos bajos. Esto hace que en los trayectos urbanos puedas realizarlos casi en cualquier marcha sin tener que hacer uso del embrague, todo un acierto pensando en la circulación entre coches y con continuas arrancadas y paradas. Su manillar, aunque es ancho, permite zigzaguear y buscar los espacios pequeños para circular con soltura. 

royal enfield interceptor 650 prueba accion 1

Pensaba que con 47 CV la moto no iba a resultar tan eficaz en carretera, pero estaba totalmente equivocado. La buena entrega a bajo régimen junto con una transición lineal y rápida a la zona media y alta del cuentarrevoluciones permite aprovechar cada una de las marchas y terminar rodando a un buen ritmo
Pensaba que con 47 CV la moto no iba a resultar tan eficaz en carretera, pero estaba totalmente equivocado. La buena entrega a bajo régimen junto con una transición lineal y rápida a la zona media y alta del cuentarrevoluciones permite aprovechar cada una de las marchas y terminar rodando a un buen ritmo. A esto hay que sumar el buen escalonamiento del cambio, el cual resulta también bastante preciso pues en todo un día a sus mandos no sufrí ningún salto entre marchas. Es una moto muy fácil de usar que no asusta al abrir con ganas el acelerador y eso que carece de control de tracción. Es un motor para ayudar a los más inexpertos pero capaz de divertir a los más experimentados. Otra grata sorpresa es la ausencia de vibraciones al máximo de vueltas o de tirones al mínimo.

La autopista es un terreno más incómodo para esta naked por aquello de la protección aerodinámica pero no por limitaciones mecánicas, pues nuevamente el "twin" vuelve a demostrarnos lo mejor de sí mismo al mantener las velocidades legales sin sentirlo forzado y con suficiente par como para realizar recuperaciones de manera segura o afrontar repechos sin perder la velocidad.

De curva en curva

Tres terrenos distintos -ciudad, carretera y autopista- pero la misma impresión respecto a las suspensiones, cuyo confortable ajuste va en consonancia con la filosofía de esta montura. A baja velocidad o en asfalto en mal estado, como a veces sucede en ciudad, se agradece mucho ese comportamiento, mientras que en la carretera se echa un poco de firmeza en el tren delantero cuando se rueda a ritmo alto. Y es que a pesar de su imagen de moto de paseo, la Interceptor 650 permite ir rápido en cuanto el trazado se torna revirado. Es una moto muy ágil, con un chasis muy rígido al que se suman unos amortiguadores de repuesta más firme que el de la horquilla. Pueden resultar algo rebotones en los baches más pronunciados, pero el gran mullido del asiento se encarga de minimizar sus efectos en la espalda y el trasero. Las inclinadas y los cambios de dirección se realizan de manera natural, en donde destaco el buen agarre de los neumáticos Pirelli Phantom SportComp desarrollados expresamente para ella y montados sobre unas llantas de 18", una medida poco habitual en motos enfocadas al asfalto.

royal enfield interceptor 650 prueba accion 2Con tan buen funcionamiento te vas animando y eso obliga a hacer un uso más intensivo de la frenada. Como indicaba al inicio, la Interceptor monta un único disco delantero de 320 mm de diámetro, acompañado de otro trasero y mordidos ambos por una pinza ByBre y con la ayuda del ABS Bosch de doble canal. Es un equipo suficiente para esta moto que no requiere de grandes esfuerzos para apretar la maneta derecha pero sí que obliga a saber dosificar el pedal del freno trasero, pues el comportamiento del ABS no es tan fino y no resulta complicado hacer derrapar mínimamente la rueda trasera. Una circunstancia que, en cambio, no ocurre en las reducciones gracias al buen funcionamiento del embrague antirrebote.

Valoración y opinión Royal Enfield Interceptor 650

Los usuarios del A2 a los que les gusten las clásicas tienen en la Royal Enfield Interceptor una gran candidata. Es una moto con historia y pedigrí, el cual estrena el nuevo motor bicilíndrico de la marca india que sorprende por su facilidad de uso, su suavidad y la capacidad para extraer toda su potencia sin necesidad de ser un piloto experimentado.

royal enfield interceptor 650 prueba motorEs una montura enfocada para el uso diario, muy agradable para circular por ciudad pero que por prestaciones y carácter permite disfrutar en carretera. Pero no sólo por lo que ofrece su motor, también por una parte ciclo que responde a un buen nivel, especialmente los frenos y, en menor medida, las suspensiones. 

En definitiva, podemos decir que es una naked muy cómoda y efectiva con la que Royal Enfield ha dado un salto de calidad en cuanto a acabados, aunque todavía le queda un poco para acercarse a sus principales rivales, como son la Moto Guzzi V7 III o la Triumph Street Twin, monturas más equipadas electrónicamente pero también de precio superior.

Equipo piloto 

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