En la actualidad, las motos eléctricas van cobrando mayor auge en distintas partes del mundo; inclusive en México, las ofertas de este tipo de transporte van creciendo, y se presentan como una gran alternativa de movilidad para las grandes ciudades, pues están limitadas a la autonomía que ofrecen sus baterías.
Pero cuando se trata de realizar un viaje más largo, la electricidad se queda estacionada y utilizamos una motocicleta a gasolina de mediana a alta cilindrada, por aquello de la autonomía, pues cuando el depósito de combustible nos alerta de que está por terminarse, basta con detenernos en una gasolinera, repostar y seguir nuestro camino.
Sin embargo, para Zijian Zhao eso no fue un impedimento para cumplir con su deseo de aventurarse en un recorrido de más de 2,000 kilómetros, de Estocolmo a Roma, a bordo de un scooter eléctrico, pues quiso demostrar que no hay fronteras cuando hablamos de motos eléctricas, aunque eso le implicó detenerse cada 120 kilómetros para recargar las baterías, algo que a Zhao no le importó.
De manufactura italiana y bautizada por el propio Zhao como Mapellie, su scooter Garelli Ciclone E4 es impulsado por un motor eléctrico firmado por Bosch, colocado en el rin de la rueda trasera, que genera 5.4 caballos de fuerza y 118 libras-pie de torque, alimentado por una batería de iones de litio de 35 Ah de capacidad.
Estas prestaciones le permiten, además de desarrollar una velocidad máxima de 70 km/h, una autonomía de hasta 120 kilómetros por recarga y que demora hasta 4 horas en recargar al 100 por ciento. El Ciclone cuenta con frenos de disco delanteros y traseros, así como un mono amortiguador en el basculante trasero.
Si bien el objetivo de Zijian Zhao era recorrer 5,000, finalmente consiguió marcar en el odómetro 2,000 kilómetros, una distancia considerable para viajar en una pequeña moto eléctrica que lo llevó por 11 países: Polonia, República Checa, Austria, Eslovaquia, Hungría, Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Italia, San Marino y Ciudad del Vaticano. En sus planes estaba visitar Francia y el Principado de Mónaco, pero su recorrido terminó en Milán.