La diferencia la marcan sin duda cosas como la capacidad de alumbrado de la moto o tener la del casco adecuada. Repasemos qué hay que tener en cuenta para circular seguro en la oscuridad:



1.- ¿Qué tal ves por la noche?


No todos vemos igual en condiciones de luz escasa. De hecho, que veas perfectamente de día no quiere decir que tengas la misma agudeza visual en la oscuridad. Los oftalmólogos diferencian entre miopía diurna y nocturna, además no todas las pupilas reaccionan con la misma velocidad a los cambios de luz. Si sufres destellos, careces de contraste en las zonas oscuras o te deslumbran mucho las luces de los vehículos que vienen de frente, adapta tu ritmo a tus aptitudes visuales: no te la juegues intentando ir al mismo ritmo que a la luz del día si no lo ves claro, nunca mejor dicho.



2.- La luz de la moto en orden


Es frecuente ver vehículos con defectos en la iluminación, una negligencia tan peligrosa como la que más a la que por ignorancia no se le da la gran importancia que tiene. Cuando circules de noche debes poder confiar en tus luces, tanto para ver como para que te vean. La lente del faro principal debe estar limpia, funcionar correctamente en larga y corta, su altura también debe ser la correcta. Comprueba con frecuencia que funciona el foco trasero (se ven muchas motos con él fundido sencillamente por despiste) y la luz de freno.



3.- ¿Cómo regular la luz?


Para comprobarla debes colocar tu moto o scooter frente a una pared, a una distancia de entres tres y cinco metros y observar que ilumine recto (no se desvía hacia un lado) y que la altura de la luz en la pared es ligeramente más baja que la horizontal. Para regularla, en caso de que algo no esté correcto, debes consultar el manual de instrucciones de tu moto.



4.- No deslumbres a los vehículos que vienen de frente


Si has regulado la luz correctamente no deslumbrarás a los demás usuarios de la vía con las luces cortas, pero hay muchos conductores que para compensar la falta de luz de sus motos circulan por la noche constantemente con las luces altas. Seguramente molestarás a los conductores que circulen hacia ti. Te ganarás su desaprobación y frecuentemente te pagarán con la misma moneda.



5.- De noche no adelantes a tu propia luz

Es “imposible pero cierto”. Si no eres capaz de ver al mismo ritmo que circulas, tienes posibilidades altas de darte un susto; da igual que sea de noche o haya niebla, por ejemplo. En este sentido debes hacer un buen uso de la luz alta; conectándolas cuando no deslumbres a nadie para ganar campo visual y profundidad, pero ten el dedo cerca de la palanca del cambio de luces para volver a la luz normal o baja en cuanto aparezca alguien de frente.



6.- Circula con espacio


Como en muchas circunstancias en las que nos encontramos ante condiciones complicadas conduciendo, cuanta mayor sea la escapatoria que tengamos a nuestros lados y de frente mayor será nuestra seguridad en caso de tener que realizar alguna maniobra de emergencia.



7.- Mira la raya de la derecha

Con tráfico intenso de frente o si viene un vehículo que te deslumbra, seguirás mejor el trazado de la carretera fijando la vista en el margen derecho. Así evitarás la fuente de deslumbramiento y la zona “ciega” que produce a su alrededor. Llevarás la vista más descansada y tendrás mayor campo visual.



8.- Usa ropa de alta visibilidad


Tan importante es ver como ser visto. De noche obviamente se ve mucho menos a los vehículos de pequeño tamaño como motos, por tanto es fundamental hacer todo lo que esté en nuestra mano para llamar la atención de nuestra presencia en la carretera a la mayor distancia posible. Las luz trasera de las motos va colocada a una altura que puede quedar tapada por otros vehículos y en muchos casos además no se caracteriza por su intensidad. Es más que recomendable, diría que debería ser obligatorio, circular con ropa apropiada y dotada de elementos reflectantes; especialmente el casco, que al estar en la zona más alta del conjunto moto-piloto puede ser visto aunque haya coches de por medio.



9.- Casco y visera. 


El estado de la visera del casco resulta esencial para apreciar el entorno del motorista en conducción nocturna. Si está rayada o sucia te molestará y limitará tu capacidad visual, por lo que es más importante todavía que conduciendo a la luz del día procurar tenerla completamente limpia. Por otro lado, si tu casco ofrece un desempañado ineficaz se hará más patente por la noche. Aunque parezca evidente hay que decirlo: las micas ahumadas no se deben usar si ya no hay buena luz. Mucha gente utiliza la misma visera durante toda la vida útil del casco, quizá porque no saben que todas las marcas venden repuestos de sus viseras: cámbiala, por seguridad, cuando ya no esté en buenas condiciones.



10.- Si vas a circular mucho por la noche, tenlo en cuenta al comprar moto:


Es tristemente cierto que muchas motos carecen de una iluminación mínimamente “decente” para ver en la medida de sus prestaciones en conducción nocturna. Cada vez más marcas toman más conciencia de la importancia de ofrecer buena luz, pero ojo: no todas son buenas, Si prevés circular de noche por carretera  o ciudad busca que tu nueva moto disponga de ópticas de calidad.