Los que tenían debilidad por la polivalente y eficaz mecánica de Kawasaki pero no se identificaban con ninguna de las opciones que emplean esa base propulsora, ya tienen una nueva e interesante propuesta en clave neo-retro que quizás pueda seducirlos. O simplemente una alternativa a la vanguardista línea "Sugomi" de la Z650. A nosotros nos cautivó desde el primer momento que la vimos y ya teníamos ganas de ponernos a los mandos de este revival que rinde tributo a la Z650-B1 del año 1977. Este concepto se basaba en la Z1 que Kawasaki introdujo en el año 1971 y por eso estamos celebrando sus 50 años de existencia que la marca japonesa ha plasmadado en unas versiones Z 50º Aniversario.
Volviendo a nuestra protagonista que luce un espectacular verde con efecto purpurina o metal flake en combinación con llantas doradas estilo multirradio, tengo que admitir mi admiración por esta puesta en escena tan lograda. Todos los detalles le confieren una personalidad arrolladora, desde el faro redondo, pasando por el precioso depósito de combustible de 12 litros (un poco escaso) en forma de lágrima con el logotipo clásico de Kawasaki, la instrumentación con dos esferas analógicas o la minimalista parte trasera que concentra gran parte de su encanto. Un escape cromado con forma de megáfono hubiese sido una brillante culminación.
Pero como la Kawasaki Z650RS comparte toda la base motriz con la gama bicilíndrica de 650 cc, un escape específico hubiese complicado el desarrollo del modelo, ya que estamos ante una mecánica Euro5. Los 68 hp son garantía de un buen servicio tanto en ciudad como en carretera, haciendo gala de un rendimiento además muy afinado en cuanto a vibraciones. Y también resultan una cifra perfecta para los que van empezando, acceder a una moto de manejo sencillo pero ya con las hechuras de una moto de cierta entidad.
Y es que la Kawasaki Z650RS es una moto agradable a los mandos gracias a una buena compenetración de su motor con el resto de los elementos que forman su parte ciclo. Usa una base sencilla en la que todo funciona de forma eficaz y no recurre a elementos electrónicos aunque sí dispone de embrague antirrebote como una importante ayuda a la conducción.
La ergonomía también se ha adaptado a un espíritu diferente, por eso el manillar es más alto y ancho, con el objetivo de marcar una postura muy natural, y el asiento es corrido, de diseño más clásico. Además la altura al suelo es menor, haciendo la Kawasaki Z650RS una moto muy accesible para personas de cualquier talla.
Les desarrollamos todo en el siguiente vídeo...