La inyección de efectivo, que llegó apenas tres días antes de la fecha límite del 23 de mayo, significa que el fabricante austriaco ahora puede cumplir con sus obligaciones impuestas por el tribunal y pagar la cuota acordada del 30% a los acreedores, un salvavidas que permite a las tres filiales de KTM evitar la liquidación y seguir operativas.
Este pago es parte de un plan más amplio para cancelar el 70% de la deuda de 2,250 millones de euros de KTM, una medida que se aprobó a principios de 2025 después de un periodo de autoadministración de 90 días, a partir del 29 de noviembre pasado.
“Pierer Mobility AG y KTM AG han recibido compromisos de financiamiento, sujetos a la ejecución de los acuerdos necesarios, que garantizarán que los pagos de las cuotas para cumplir con los planes de reestructuración de KTM AG, KTM Components GmbH y KTM Forschungs- & Entwicklungs GmbH puedan completarse a tiempo antes del 23 de mayo de 2025”, señaló Pierer Mobility en un comunicado.
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Anteriormente, se solicitó a Citigroup Global Markets Europe AG ayuda para obtener hasta 800 millones de euros en inversión externa. Por el momento, no se ha confirmado si su participación ha dado frutos directamente o si el financiamiento provino del círculo de accionistas de Pierer.
A pesar de la incertidumbre, todo apunta actualmente al socio indio Bajaj Auto. Recientemente, la división de inversión europea de Bajaj habría recaudado 566 millones de euros mediante préstamos sin garantía de JPMorgan, DBS y Citigroup, según medios de comunicación independientes.
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Aunque el propósito oficial del préstamo de Bajaj aún está por confirmar, el momento y el monto se superponen obviamente con las necesidades financieras de KTM. El gigante indio, que posee una participación del 49,9% en KTM, ya ha participado activamente en la resurrección de KTM, ayudando a poner en marcha las líneas de fabricación de la marca austriaca en marzo con una importante inyección de efectivo.
El siguiente paso en la recuperación de KTM será depositar los 600 millones de euros en el administrador concursal. Una vez hecho esto, se espera que los tribunales austriacos aprueben oficialmente el plan de reestructuración a principios de junio.