Por un lado la firma levantó el telón para mostrar la nueva Classic 650, una moto de estilo neo-retro que es impulsada por el conocido y confiable motor bicilíndrico en paralelo de 650 cc, refrigerado por aire y aceite.
La llegada de la Classic incrementa la oferta de motos de Royal equipadas con este propulsor a seis modelos, después de haber comenzado con la Interceptor y la Continental GT en 2018. El nuevo modelo comparte un estilo similar con la Classic 350 existente, así como con el monocilíndrico de la Classic 500 que la anterior.
Entre esos rasgos similares se incluyen llantas de radios de 19 pulgadas al frente y de 18 pulgadas atrás, así como horquillas delanteras telescópicas de 43 mm y el marco cromado del faro delantero. Las salpicaderas también parecen similares, con la rueda trasera envuelta en un marco externo de metal muy similar al de la 350 actual.
La suspensión trasera está integrada por dos amortiguadores regulables en precarga, con un freno de disco único y una pinza de doble pistón disponible en cada extremo, con ABS. El motor ciclista está alojado en el mismo bastidor tubular de acero que utilizan las Super Meteor y la Shotgun. La nueva Classic está disponible con o sin asiento para el pasajero, mediante un mecanismo atornillado.
El motor está acoplado a una caja de cambios de seis velocidades y produce 46 caballos de fuerza a las 7,250, los cuales tienen que mover considerables 243 kilos, con el 90% de sus 14.8 litros de combustible, lo que significa que el rendimiento seguramente será moderado. Pero esta moto no fue creada pensando en el rendimiento e incluye una altura del asiento de 800 mm y componentes de la suspensión delantera como trasera fabricados por Showa.
Otros detalles incluyen un faro LED, además de un par de luces de apoyo a cada lado, como las que se encuentran en la 350 más pequeña, una característica que ha aparecido en varios modelos Royal Enfield desde 1954. Estará disponible en una selección de color verde azulado, rojo Vallam, azul Bruntingthorpe y negro cromado.
Royal Enfield Bear 650: la scrambler de la firma, con fuerte sabor retro, ya es una realidad
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Por otro lado, Royal Enfield confirmó que entrará en el mercado eléctrico urbano en 2026, con un par de nuevos modelos alimentados por batería, ambos con el icónico nombre Flying Flea. De acuerdo con la firma, esto formará una nueva submarca de movilidad eléctrica.
Estarán disponibles dos motos: un C6 retro y un S6 scrambler; la primera utilizará un par de complejas horquillas de viga para diferenciarse del resto de la competencia. Hay detalles limitados sobre ambos modelos, que permanecen en desarrollo antes de una presentación posterior, sin embargo, ambos ofrecen niveles de rendimiento "urbano plus" para circular por la ciudad y viajes ocasionales fuera de ella.
“Es un mercado que no ha sido descifrado. No estamos tirando los dados y esperando que todo salga bien, creemos en esto. Creemos en esto como una plataforma que va a crecer en vehículos urbanos plus”, señaló en el evento de presentación el director de Eicher Motors, la empresa matriz de Royal Enfield, Siddhartha Lal.