Parece que las nuevas normativas están condenando a las motos deportivas de alta cilindrada, como sucedió con la Yamaha R1, pues el cambio de la Euro 4 a la Euro 5 provocó que el modelo se descontinuara, que ya no se pudiera vender en el Viejo Continente y, en consecuencia, que Suzuki no quisiera renovarla.
El modelo dejará de fabricarse en su país de origen, en Japón, y aunque todavía se comercializa en Estados Unidos, otras partes de Asia y el mundo, lo cierto es que si la producción cesa en casa, tarde o temprano no llegará a otras partes del planeta.
Prueba Suzuki GSX-8S
Recordemos que fue en 2001 nació la Suzuki GSX-R 1000. Una moto deportiva mucho más ligera y moderna que la anterior GSX-R 1100, de la que poco heredó y que marcó la línea de las superdeportivas de Suzuki hasta la fecha. La inspiración de esta moto siempre ha sido el mundo de las carreras, del que heredaba su carácter y su filosofía.
En 2001, Suzuki mantuvo el listón muy alto en una era en la que comenzaba la persecución de las motos deportivas. En aquel momento estrenó el nuevo motor de 988 cc, que generaba 160 caballos de fuerza a partir de las 10,000 rpm, que le permitía alcanzar una velocidad máxima de 287 km/h.
En México, Suzuki mantiene la comercialización de la GSX-R1000R, con precios que inician en 450,490 pesos, impulsada por un motor de cuatro cilindros de 999.8 cc, refrigerado por líquido, acoplado a una caja de seis velocidades y transmisión secundaria por cadena.
El conjunto está montado en un chasis de aluminio, al que se ancla un esquema de suspensión con amortiguador de aceite Showa y telescópica invertida, también Showa, en el eje delantero.