En el mercado de las eléctricas, Yamaha no se ha quedado atrás y presentó su segundo prototipo de moto trial: la Yamaha TY-E 2.0, que ya renovada presenta mejoras de valor agregado como el peso, el rendimiento y la potencia. Capaz de identificar cualquier cambio en materia de adherencia del terreno. 

A diferencia de la primera base que fue lanzada 2018, este modelo pesa un 20 por ciento menos, dejándola en 70 kg. Se le incorporó una batería de iones de litio más pequeña con una capacidad 2.5 mayor. Cuenta con un chasis monocasco de material composite CFRP (Carbon Fibre Reinforced Plastic), plástico reforzado con fibra de carbono.

Al añadir nuevos sensores, embrague y electrónica de control, mejoraron la tracción, el funcionamiento, y el tacto del motor eléctrico. Su controlador electrónico es óptimo para el requisito único de la competencia mundial de pruebas, que favorece el torque sobre la potencia pura.

Esta intrépida TY-E 2.0, con la apariencia de una X, sabe sacar provecho con el impulso de su par instantáneo y sus fuertes aceleraciones. A pesar de los avanzados componentes electrónicos, las llantas, frenos y suspensiones no tuvieron cambios.

La TY-E 2.0 exhibida en el 49 Salón de Tokio 2022, sacará la casta al participar en algunas pruebas del Mundial de Trial a partir de junio, con la destreza del piloto Kenichi Kuroyama. La firma jamponesa marca un precedente a la huella de carbono cero para cumplir el Plan Medioambiental en todas sus actividades empresariales (incluido el ciclo de vida de sus productos) previsto para el 2025.