KTM 150 EXC-TPI 2020

KTM 150 EXC TPI

La KTM 150 EXC TPI es la gran novedad dentro del catálogo de enduro de la marca austríaca. Hasta ahora la versión de 150 2T se ofrecía sólo para competición pues no se podía matricular al no cumplir con la homologación Euro4, lo mismo que la pequeña 125. Pero en 2020, KTM ha incorporado a la 150 el sistema de inyección TPI para cubrir el hueco dejado por la 125 2T.

El sistema de inyección TPI convierte a la 150 EXC en una moto muy fácil de pilotar, con mucha potencia en todo su rango de potencia, lo que la hace ideal tanto para pilotos inexpertos como para que los más avanzados le saquen todo el partido. Además, su consumo y el nivel de emisiones es bastante reducido ya que las pérdidas por combustible no quemado son mínimas y todo ello con la posibilidad de utilizar bujías de tipo tradicional. Por otro lado, el nuevo motor no necesita recarburar la moto ni realizar la premezcla de aceite. El arranque es eléctrico, para lo que cuenta una batería de ion-litio situada bajo el asiento.

La caja de cambios es de seis velocidades, con una relación heredada de la versión anterior pero con unos engranajes mejorados para aumentar la fiabilidad. También son nuevos los radiadores, colocados 12 mm más abajo que en 2019 lo que permite un mejor centrado de masas y una mejor refrigeración. El escape está fabricado mediante tecnología de estampado 3D, mientras que el escape ha sido rediseñado y aligerado.

Al igual que el resto de la gama de enduro, la 150 EXC recibe un nuevo chasis más ligero y rígido que el anterior, lo que incrementa la estabilidad y la manejabilidad de una moto ya de por sí muy ligera -96,8 kg-, con lo que, en definitiva, se gana en diversión. Se mantiene la horquilla WP Xplor de 48 mm de diámetro y el amortiguador WP Xplor progresivo PDS sin bieletas, ambos totalmente regulables, pero se han modificado algunos componentes internos para conseguir una mayor resistencia a los topes. Los frenos siguen siendo Brembo y el basculante de aluminio fabricado en una sola pieza. Lo que sí ha variado es la caja del filtro para mejorar el flujo de aire y mayor protección frente a la suciedad -cuenta con sistema para evitar la colocación errónea del filtro-.

En 2020 se estrena una nueva carrocería y un nuevo asiento, con lo que se mejora notablemente la ergonomía. Además, se añade un manillar Neken de aluminio y puños ODI. Las estriberas son antisuciedad y están situadas 6 mm más altas que las del modelo de cross.